Gartner ha planteado esta misma cuestión a más de 1.400 profesionales de RRHH de 60 países, incluidos directores y responsables del área. Las conclusiones son claras: en 2025, los líderes de RRHH tienen cinco grandes prioridades sobre la mesa.
El desarrollo de los líderes y gestores, el refuerzo de la cultura organizacional, la planificación estratégica de la fuerza laboral, la gestión del cambio y la optimización de la tecnología en RRHH dominarán las agendas los mandos superiores.
A continuación, profundizamos en cada una de estas áreas, basándonos en datos que los expertos de Gartner han recopilado de profesionales del sector en su informe “Gartner Top 5 Priorities for HR Leaders in 2025”.
Desarrollo de líderes y gestores: ¿están preparados para el futuro?
A pesar de las constantes inversiones en programas de liderazgo, muchas organizaciones siguen enfrentando un reto persistente: la falta de líderes capacitados para afrontar los desafíos del futuro. En este contexto, solo el 23% de los responsables de RRHH confía en que los actuales candidatos tienen las habilidades necesarias para satisfacer las necesidades de sus organizaciones. Si bien las empresas se esfuerzan por formar a sus futuros líderes, los programas de desarrollo no siempre logran conectar con las necesidades reales del día a día. Los enfoques tradicionales, a menudo demasiado teóricos o genéricos, no se adaptan a un entorno tan dinámico y complejo.
Entonces, ¿qué se puede hacer al respecto? La clave está en facilitar espacios de networking y colaboración, creando oportunidades para que los líderes apliquen lo aprendido en situaciones reales. Estos entornos permiten no solo adquirir conocimientos, sino también fortalecer las relaciones profesionales y mejorar la capacidad de resolución de problemas.
Un líder bien preparado, que ha vivido experiencias de aprendizaje práctico, está mucho más capacitado para guiar equipos hacia la innovación y adaptación. Además, no hay que olvidar que un liderazgo fuerte también genera un ambiente de trabajo más cohesionando y productivo.
Cultura organizativa: ¿solo un manual o algo vivo?
La cultura organizativa no puede ser solo un concepto abstracto ni un conjunto de valores escritos que quedan olvidados en un manual. La cultura es lo que realmente conecta a los equipos, lo que guía las decisiones diarias y lo que marca la diferencia en un mercado competitivo.
Sin embargo, Gartner revela que más del 50% de los líderes de RRHH no se sienten completamente responsables de influir en la cultura de su equipo, lo que genera una desconexión que puede afectar seriamente al compromiso y al rendimiento de los empleados.
¿Cómo transformar esta situación? Es fundamental integrar los valores culturales en los procesos diarios. Si los empleados comprenden cómo esos valores se aplican a sus decisiones y comportamientos, aumentará significativamente su compromiso con la organización.
Además, la clave está en comunicar de forma clara y constante. Los valores no solo deben ser entendidos, sino también interiorizados por todos los miembros de la empresa.
Por supuesto, los líderes deben ser los primeros en predicar con el ejemplo, mostrando comportamientos que reflejen esos principios. Las empresas que logran integrar la cultura en todos los aspectos de su operación ven incrementos en el compromiso, un mejor rendimiento general y una reducción de la rotación laboral.
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Planificación estratégica de la fuerza laboral: ¿reactivo o proactivo?
Las empresas a menudo abordan la planificación de la fuerza laboral de forma reactiva. Es decir, se enfrentan a los problemas cuando ya están presentes, sin anticiparse a los cambios. Este enfoque limita la capacidad de la organización para adaptarse a situaciones inesperadas, como crisis económicas, cambios tecnológicos o fusiones y adquisiciones.
El informe de Gartner señala que las organizaciones que no adoptan un enfoque estratégico y proactivo corren el riesgo de quedar desbordadas ante estos cambios. Entonces, ¿cómo mejorar esta planificación?
El primer paso es comenzar poco a poco, con proyectos piloto que permitan ajustar las estrategias y definir objetivos claros. Es fundamental identificar las habilidades clave que serán necesarias en el futuro y crear planes para formar a los empleados internos o atraer talento externo con esas capacidades.
En lugar de reaccionar ante los problemas, las organizaciones deben anticiparse y garantizar que sus planes sean sostenibles y adaptables a largo plazo. La planificación estratégica de la fuerza laboral es la base para asegurar el éxito de cualquier organización en un entorno que cambia rápidamente.
Gestión del cambio: ¿cómo evitar el agotamiento?
El ritmo vertiginoso de los cambios organizacionales ha generado una fatiga considerable en los empleados. Gartner revela que el 73% de los trabajadores sufren agotamiento debido al continuo proceso de transformación. Este cansancio impacta negativamente en su rendimiento y motivación, lo que hace que las empresas deban repensar su enfoque para gestionar el cambio.
En lugar de imponer cambios desde arriba, es fundamental involucrar a los empleados en el proceso desde el principio, ofreciéndoles el apoyo necesario para adaptarse a las nuevas realidades.
Los enfoques tradicionales de gestión del cambio, centrados en un modelo top-down, suelen fallar porque no consideran la perspectiva de los equipos que están directamente afectados. Por ello, es crucial identificar a los “agentes del cambio”, empleados clave que puedan actuar como promotores del proceso dentro de sus equipos.
A través de ellos, se fomenta la aceptación del cambio, ya que las transformaciones se perciben como algo proveniente de dentro, y no como una imposición externa. Un cambio gestionado de manera efectiva no solo evita el agotamiento, sino que también asegura que las transformaciones sean exitosas y sostenibles.
Tecnología en RRHH: ¿estamos aprovechando todo su potencial?
La tecnología ha revolucionado el mundo de los Recursos Humanos, pero según Gartner, el 55% de los líderes en este campo considera que las soluciones tecnológicas actuales no cubren las necesidades presentes ni futuras de las organizaciones.
Muchas veces, la tecnología se utiliza únicamente para automatizar tareas rutinarias, pero se pierde de vista su enorme potencial para transformar de forma estratégica el departamento.
Entonces, ¿qué podemos hacer para aprovechar mejor la tecnología? Lo primero es definir una visión clara sobre cómo las herramientas tecnológicas pueden contribuir a los objetivos generales de la empresa. Las reuniones periódicas con los proveedores de tecnología son esenciales para adaptar las herramientas a las necesidades reales de los equipos de RRHH.
Y, sobre todo, la tecnología debe centrarse en mejorar la experiencia del empleado. Al automatizar procesos y simplificar tareas, no solo se ahorra tiempo, sino que también se mejora la productividad y la satisfacción de los trabajadores.
El futuro de RRHH: adaptarse para liderar
El futuro de los Recursos Humanos está marcado por un entorno laboral cada vez más incierto, con avances tecnológicos constantes y necesidades empresariales que no dejan de evolucionar. Ante este panorama, los profesionales de RRHH deben estar preparados para adaptarse y liderar la transformación dentro de sus organizaciones.
Esto implica replantear las estrategias de desarrollo del liderazgo, fomentar una cultura sólida que guíe a los equipos, diseñar planes de planificación laboral estratégicos y aprovechar al máximo las herramientas tecnológicas disponibles.
Las organizaciones que se enfoquen en estas prioridades no solo estarán mejor preparadas para afrontar los retos del futuro, sino que también se posicionarán como líderes en un mercado cada vez más competitivo.
¿Estás listo para liderar el cambio en tu empresa en 2025?
